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Presentación

¿Qué hay, mortales? Aquí buscando de quién hacer costal. Hay mucho tema por ahí, especialmente el político, que ahora anda encendido. El deportivo también. Pero en general y concreto, los blogs. Hay tanto diablo por allí publicando estupideces, que yo mismo me animé a existir para intentar estremecerlos. Si tienes un blog, cuenta conmigo, tontín, porque contigo estaré.
Mi mecánica: iré al blog y dejaré un comentario, mismo que aparecerá como una especie de entrada; si el blog es bastante estúpido o publica algo retador de la inteligencia humana, lo traeré aquí para desmenuzarlo como pueda, dejando -por supuesto- el respectivo aviso a su responsable en la fuente origen. ¡Hay, dios, cómo me he divertido! Si ya he empezado desde hace rato a hacerlo.
Advierto desde ya que no soy ni amigo ni enemigo de nadie. Soy un ermitaño, que se suple así mismo para vivir. Me masturbo, para que saquen una conclusión. Es decir, inmune a los desprecios que me puedan soltar, pero completamente responsable por los que suelte.
Vea usted: pueden llevarme a juicio si quieren porque me burle de la tontería de los demás. Total: ninguna tontería mata a nadie, si es el caso que la gente se burla de un tonto, porque a la final un tonto hablando pajas es como un muerto. Y de eso vivo yo, de los cementerios neuronales.
Saludos.

miércoles, 21 de enero de 2009

El Discurso del Oeste versus El Diario de la Crisis

Pulso Algunos blogueros dan espectáculos. Por ahí anda el duelo entre José Roberto Duque (El discurso del Oeste) y su sempiterna tachuela, Luis (Diario de la Crisis). A su modo, se aman. Se tiran puntas, se censuran entre sí, se quejan de que el otro le metió un dedo en un lugar del cuerpo. El primero firma como periodista, claramente definido contra podridos paradigmas; el segundo, como científico y, cuando se da basto para atacar en política, como científico político, para hablar con más propiedad. Sorprende el modo visceral cómo se entrelazan para morderse. Una pelea erótica, se dirá.

En una ocasión vi a José recriminarle a Luis que, por amor de dios, no afease el lenguaje, dado que este hombrecito le gusta escribir en lenguajes desconocidos, como un anarquista de las palabras: no respeta puntos, ni mayúsculas ni minúsculas, y a veces sus escritos pierden el sentido de lo que intenta expresar. Poco ha faltado para que el Duque le haya espetado que su desorden es reflejo de un desquiciamiento interno, parental inclusive.

Y he visto, también, como el señor de las pastillas (Luis: vea cómo lo sugiere Duque), no se queda atrás y le riposta que como chavista es portador de odio casi anal, debido a que el primer señor supuestamente hasta propuso quemar los libros de Gallegos y Andrés Eloy Blanco para que desapareciese el adequismo en el país. He de imaginarme que el señor científico adoptó aquí los aires de un Freud, o algo parecido.

En fin, me he divertido un montón con semejantes visceralidades que salobran (edulcoran) la blogósfera venezolana. Y hay casos por demás, que en su debido tiempo este detector de idioteces habrá de develar. (Ojo: no me insulta que me arguyan que soy el idiota mayor, por eso de andar determinando qué es idiotismo o quien lo ejerce. ¡Zúmbese!). Usted, don lector, lo que tiene que apreciar es que la universidad también va al baño a depositar sus heces, del mismo modo que lo hace una mujer hermosa: la idiotez, como las necesidades, es patrimonio de todo humano.

Por ello jamás dejo de sorprenderme con tanto escuálido ilustrado que hay por ahí (alumnos de Harvard, Cambridge o Pekín) que se lanzan unas parrafadas de estupidez que dan ganas de mear. Evolución del intelecto, pues, como las sonadas palabras del difunto Escobar Salón, tan muerto como humanista: “debe ser sometido por la fuerza [y enviado a prisión]”, en aquel funesto año 2.002. Lo mismo digo de la izquierda, con tanto cerebro full de ortodoxia.

Aprovecho la ocasión para responderle a Luis la pregunta que me hace en su blog respecto de las pastillas que toma: ¡pregúnteselo a José Roberto Duque, no tenga pena, caballo! Fue él quien develó el misterio.

Le doy las gracias por llenar los espacios de este blog.

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Detector de irresponsabilidades (consigo mismo)

Estoy esperando que don Jeanfreddy, el de Hay que ser irresponsable, publique el siguiente comentario que le deje en su blog:
"Epa, bienvenido al mundo de la crítica bloguera. Aquí tiene su post: La falta de cojones de Hay que ser irresponsable
No todos somos perfectos: mi defecto es disfrutar de la inconsistencia."
Pero el hombre nada que lo publica. Veré si escribo algo bueno o zalamero para que me dé cabida en su página.
De todos modos, el tipo es una mar de irresponsabilidad e indefiniciones, hasta el punto que no sé a quién me dirijo cuando le hablo, si al de izquierda o al de derecha. Fumando, espero. Digámosle Galle, el irresponsable, por aquello de que con la "o" escribimos "gallo", y con la "i", "gallina". La "e" la dejamos para el animal neutro. Tiene todavía el beneficio de la duda.

Las predicciones de Nostragamos... (el comentario)

Apuesta: con seguridad el comentario será borrado (note usted que nada malito dice, sino que resalta el grado de frustración de ciertos seres, cosa que en sí no es mala, sino verdad).
Conseguí aquí un problable candidanto a que nos anime con sus loqueras lo triste y monótono de la vida. Le hice un comentario y pueden verlo aquí: http://awurl.com/5RfoYKiZN. Lo linkeo con este recurso porque, seguramente, como hacen Fernando (Luces y Sombras) y Lennys (Gata Febril), lo borra.

Igual situación para este otro comentario: http://awurl.com/RUffxZ6mi, donde Doña Marchita Colmena.
En ambos, busque los resaltos en amarillo y lea.

Oficio de enterrador

Visiten este blog, puede desaparecer: No a la enmienda. Es que la enmienda todavía puede ganar...
Ojo: si ha sido borrado por causa de la desilusión del autor y usted quiere saber algo sobre el especímen autoral, vaya aquí, que aquí se enconcha, como si nada, como si no hubiese hecho el ridículo con su creación:
Planeta cómico

Las entradas de este blog son comentarios dejados en otros (aunque a osados le damos lo suyo):