Los invito a ver las peripecias de un blog que se llama Gota febril, mismo que utiliza una fachada de paz, de cuida-flores flores, para esconder la travesuras de su autora niña en otros blogs, donde parece recomendar y apoyar las mayores frivolidades políticas, contrarias a lo que predica en su bitácora personal, como al leer el link abajo se enterará. Dado el número de personalidades que el blog muestra, debería llamarse “legión” (o “Gota ambidiestra”, “Polvillo”, “Gota diversa”, “Niágara mental”), recordando lo que le respondió un poseso a Jesús cuando le preguntó el nombre: “Mi nombre es Legión”. Ella misma subtitula el blog como “Mi recorridos” o correrías. Por ahi va la cosa.
¡Caramba, cuanta inconsistencia! Mi persona se vio obligada a dejarles unos comentarios, los cuales podéis contemplar en este enlace: http://gotafebril.blogspot.com/2009/01/la-nina-que-silencio-la-onu.html#comments; o aquí, donde resalto mi comentario (y por si acaso Lennys, la bloguera, lo borra): http://awurl.com/cggfJwi9x (si no puede ver el área resaltada, a su vez resalte). No se sabe si es del tipo de gente que no aguanta que le digan las incosistencias que ella dice en otros sitios y va y borra el comentario en la bitácora propia. Ya tiene a varios blogueros por ahí confundidos con sus atribuciones y atribulaciones mentales (a Khandica, Duque). (Me apiado de los palestinos, pero, “ja, ja, ja”, me da risa su defensa –parece decir en unos de esos-).
Les dije que traería los blog candidatos a las tonterías al mio, para exponerles un vivero de la sinrazón bloguera.
De hecho, estoy por poner una encuesta para elegir los blogs más habladores de pendejadas, sin incluir, por supuesto, el mío, dado que podría ganar.